viernes, 16 de marzo de 2018

Madrid se convierte en un infierno multicultural.

Tras la muerte de un mantero (muerte que lamentamos desde aquí) por un infarto... La izquierda ha aprovechado la ocasión para atacar a la policía, culpándola de los hechos, además, se ha unido a la ira de la comunidad inmigrante de Lavapiés para convertir el barrio en una zona de guerra: Destrozos, contenedores ardiendo, ambulancias apedreadas, y violencia por doquier... Y como siempre, los vecinos han sufrido las consecuencias de los disturbios y la violencia inmigrante e izquierdista, en un barrio obrero como es el de Lavapiés.

Quizás los obreros madrileños deberían reflexionar si les conviene la inmigración masiva, o si la izquierda verdaderamente les defiende.

1 comentario: